De un tiempo a esta parte olisqueo una tendencia curiosa: gentes pirándose de Twitter porque allí el burgo anda poblado de antorchas, masa enfurecida todo el rato, la peña enfadada con el mundo (es difícil no estarlo, por otra parte), cuchillo entre los dientes y mala baba por sistema. Insultos a mansalva, trolls sin bozal, mala vibra porque sí.
Me gustó…